sábado, 27 de febrero de 2021

El arte de la versión #110

Luché contra la ley, y la ley ganó. El espíritu rebelde que desde siempre ha palpitado en "I Fought The Law" ha hecho que sea fácil identificarse con esta mítica canción, sobre todo por parte de gentes proclives a andar fuera de la manada y outsiders con querencias reivindicativas. No es extraño, por tanto, que haya sido un tema muy versioneado por grupos punks (The Clash, Dead Kennedys, Ramones, Green Day). Un himno para ellos y para tantos otros.

Lo curioso es que es una composición de 1960, cuando las letras de las canciones no solían tratar temas así. Quizá los historiadores musicales podrían establecer en ella algún indicio de los posibles orígenes del punk, porque además de lo bien que se ajustaba el mensaje a la idiosincrasia del movimiento del imperdible, era puro rock & roll, y estaba cantando con la entraña. Tenía crudeza y actitud. Por supuesto, salió escondida originalmente en una cara B, la de la dulce y romanticona "A Sweet Love", de The Crickets, la primera banda de Buddy Holly antes de volar en solitario (y morir volando al poco tiempo, en 1959). The Crickets continuaron grabando discos. El tejano Sonny Curtis, uno de los miembros fundadores del grupo y que junto a Holly había teloneado a Elvis Presley en 1955, fue el compositor principal de los Crickets. Del mismo año que el 7'' es el álbum In Style With The Crickets (Coral, 1960), en el cual estaban ambas canciones de Curtis y otro de sus éxitos, "More Than I Can Say", sí, el que décadas después popularizase de nuevo Leo Sayer.


Una de las últimas versiones que se han hecho de "I Fought The Law" aparece en los créditos de cierre de la película Intermission, del muy recomendable director John Crowley. Esta adaptación está cantada por el actor Collin Farrell, uno de los protagonistas de la cinta: interpreta a un delincuente impenitente, un forajido sin solución. (Dadle una raqueta a Farrell y creeréis estar viendo a Andre Agassi.)

Para que se perciba aún más la importancia histórica de The Crickets, Los grillos traducido a la lengua cervantina, The Beatles se inspiraron en ellos para bautizarse artísticamente.

Larga vida a Sonny Curtis. El Salón de la Fama del Rock n' Roll preserva su nombre y el de su banda.

domingo, 14 de febrero de 2021

Cosas de hermanos #87: Trastos

A veces tener detrás el empuje de una multinacional puede acarrear que del impulso acabes cayendo por un precipicio. Les pasó a Trastos, banda nuevaolera de principios de los ochenta compuesta por dos parejas de hermanos: los Crespo (Fernando Crespo al bajo y Tores a la guitarra) y los Lobato (Miguel Ángel cantando y Javier aporreando bombos y platillos), más el teclista Luis Carlos Esteban

Los produjeron mal, les obligaron a cultivar una imagen de banda para quinceañeras y obligaron a meterlos a empellones donde fuera hasta hacerlos aborrecibles para el resto de bandas de su generación.  

Sobre ellos he escrito en el blog de La Fonoteca.