lunes, 16 de marzo de 2015

Las nuevas aventuras del llanero solitario #45: The Shifting Sands


La de The Shifting Sands en su álbum Feel (Fishrider, 2012) es música alegremente triste o tristemente alegre, tristelegre, y no decimos aletriste para no confundir con el famoso personaje literario español. Traer aquí una referencia tan literaria no ha sido baladí, sino, confesémoslo, truco narrativo para ahora poder añadir que The Shifting Sands podrían estar tomando el nombre del título del cuarto volumen de la serie de novelas fantásticas para niños de la australiana Emily Rodda. Si alguien lee ese dato en alguna parte, no se ajusta a la realidad, porque lo estrictamente cierto es que el nombre de The Shifting Sands proviene de la canción de la banda de los años sesenta The West Coast Pop Art Experimental Band, de los hermanos Shaun y Danny Harris.

Muy cerca de Australia, o al menos más cerca que desde aquí, las antípodas de aquel lugar del mundo, y más concretamente en la localidad de Dunedin, en Nueva Zelanda, hay tal hervidero de músicos del pop alternativo que aquello parece un un redoxón en un vaso de agua. Por supuesto, la etiqueta Dunedin Sound no tardó en presentarse para ese pop de guitarras tan característico en marcha desde la década de los años 80, pero que ahora mismo vuelve a tener una plétora efervescente de músicos [*]. 

Michael McLeod es uno de ellos. Otrora en The Alpha State, ha emprendido la aventura en solitario con el nombre mencionado. Es su proyecto personal, aunque el nombre aparente una pluralidad que no es tal, si bien a su cobijo han intervenido en la elaboración del disco glorias del pop underground de la zona; por citar algunos: David Kilgour (The Clean), Robert Scott (The Clean, The Bats) o Robbie Yeats (The Verlaines). Se dirá, y con razón, que con mimbres así es imposible que salga un mal cesto. 


Tiene Feel una ternura y una dulzura que te desarman; escucharlo es como darse un baño al final de un día agotador en una bañera con espuma: te quedas nuevo después. Es pop derretido, fundido, entendidos estos términos como una amalgama impecable de acordes, notas y melodías; nada sobresale, todo está perfectamente empastado. De la mitad en adelante, McLeod incorpora cierto toque psicodélico en algunos cortes, aunque sigue la misma línea reconfortante. El descanso del guerrero. En su bandcamp hay subidos dos temas nuevos, lo cual hace pensar, esperanzados, que McLeod anda trabajando en un nuevo disco. 

[*] Para quien quiera profundizar en la escena actual de Dunedin, o simplemente para el que quiera escuchar buena música, se hace imprescindible acudir al recopilatorio Temporary. Selections from Dunedin’s Pop Underground 2011-2014 (Fishrider, 2014). La edición en vinilo sólo admite el adjetivo ‘maravillosa’, tanto por su contenido como por su continente.

3 comentarios:

Mike McLeod dijo...

The band is named after a song by The West Coast Pop Art Experimental Band, not after the book you reference... Just to clarify!

Gog dijo...

I’m sorry. Actually I read it somewhere… Thank you for the information. I have already modified.

In any case, it’s a great album!

Juan

Mike McLeod dijo...

No problem! Thanks for the review :)