viernes, 30 de mayo de 2014

Las nuevas aventuras del llanero solitario #39: Bart Davenport


Qué poco hace falta a veces para conseguir mucho. Ahí tenéis a Bart Davenport, vestido de superhéroe de barrio, afinando la guitarra de la que extrae esas sencillas melodías que consiguen hacer agradable cualquier momento y circunstancia. Apenas necesita algo de acompañamiento: un bajo y una batería y, a ratos, unos teclados y unos coros femeninos, todo muy elemental y diáfano. 

En realidad ese disfraz podría ser más bien el de un trovador de otro tiempo. De hecho, su bagaje musical viene de otra época; concretamente, alterna el pop de FM de los setenta con ese ochentero con matices soul que se hacía entonces. A ello le añade, con su toque personal, una pincelada de ese sol californiano que tan buen rollo da y un poco de ralladura de limón, que tan buen gusto deja siempre en cualquier receta. Physical World (Lovemonk, 2014) hace su media docena de discos en solitario; atrás queda ya la década en que tocaba con The Loved Ones y The Kinetics.



Tiene edición en vinilo, formato que le sienta muy bienpor su aroma clásico.

martes, 27 de mayo de 2014

Dime qué lees y te diré cómo se llama tu banda #27 // La influencia del centeno en la cultura popular #25: Franny & Zooey

Los estereotipos son esos árboles que a menudo no nos permiten ver el bosque. Si en cuestiones musicales nos diera por pensar en la República Dominicana, es prácticamente imposible que lo primero que nos venga a la cabeza sea una banda afín al pop de los sesenta y al indie de los ochenta y no el sonido de la bachata o Juan Luis Guerra. El dúo formado por Julio Peña y Victoria Linares andan desde 2012 intentando abrir un claro, y parece que van por buen camino. 

En general, sus influencias culturales también pasan por el mundo anglosajón. Veneran al escritor J.D. Salinger, y de su libro Franny & Zooey han tomado el nombre artístico. Es más, el título de su primer EP, Bananafish (Dufflecoat Records, 2013), también hace referencia a otro relato del escritor norteamericano, "Un día perfecto para el pez plátano". Además, la mayor parte de las letras de Franny & Zooey están en inglés; y citan a los Temptations: I woke up today to the sound of The Temptations es la línea con la que empieza "Fool of Myself". Alternan algún tema cantado en español que funciona muy bien: 


Mientras preparan material de inminente aparición, en su bandcamp puede escucharse y descargarse algunos temas.
 

domingo, 25 de mayo de 2014

Discos con portada con discos #67

El número de marzo de la revista Rockdelux llegaba por última vez a los quioscos con el habitual cedé que la acompañaba desde hacía años. Según la propia publicación, la decisión se debe a que ya no tiene mucho sentido dado el apogeo del streaming, que incluso la propia revista reconoce alimentar desde su web. Detrás también habrá, sin duda, decisiones de corte (o recorte) económico. Personalmente, ese sampler mensual era uno de los alicientes de comprarla; con y en ellos he descubierto multitud de bandas y temas a los que jamás habría llegado de otro modo. Además, la forma en que te penetra la música en streaming o en formato físico no es igual, diga lo que diga la gente. No hay color. En fin, allá verán los responsables del Rockdelux, pero que sepan que ahora que la revista ni siquiera va embuchada en un plástico, basta con ir a alguna tienda que la tenga expuesta para hojearla (o hasta leerla) sin comprarla. 

Con todo, anuncian que los recopilatorios con los mejores temas internacionales y nacionales del año sí seguirán publicándose. Curiosamente, los tres de este año, y que a la postre han sido los últimos cedés de la revista, llevan en su portada vinilos: 




Aprovechando la circunstancia, he aquí otro de esos samplers —n.º 171, febrero de 2000— también con discos en la cubierta:

viernes, 23 de mayo de 2014

El arte de la versión #92

El tributo al recientemente fallecido Josetxo Ezponda y el split de Hazte Lapón y Gúdar tienen en común varias particularidades: ambos son de estos lares ibéricos, se han publicado en un formato de 7’’, trabajan las versiones y destilan mucho cariño. Está muy bien eso del cariño; ya lo decía Kiko Veneno. En el primer caso, se trata del sentidísimo y devoto homenaje que varios músicos de Pamplona muestran por la fascinante figura del líder de Los Bichos. En el segundo, la mutua admiración que se profesan el grupo malagueño y el catalán, con el mimo y el apoyo incondicional de La Fonoteca
 
> Varios: Así que esto es el fin (4 canciones para Josetxo) [Brisa de La Palma, 2014] 
Cuatro músicos de Pamplona afines a Ezponda de una u otra forma, como cada uno explica en el inserto del disco. Roberto C. Meyer y Jon Ulecia se le acercan en estética y en coordenadas musicales. J'aimeJaime Cristóbal, a la sazón motor principal del proyecto— ha decidido perfumar su versión de "Wishin Shift" con aroma country de la mano de esa guitarra exquisita con la que nos viene deleitando en los últimos tiempos. Germán Carrascosa versionea uno de los temas más emocionantes de Ezponda. El original es estremecedor, de los temas más estremecedores que uno conoce del rock español. Aquí Carrascosa, quizá sabedor de la irrepetibilidad, ha optado por cambiarlo totalmente y llevarlo a un terreno bien diferente. La novedad es encontrarse a Cristóbal tocando la percusión. 
Puede adquirirse en varios formatos, casete incluida. Contiene fotos inéditas del Bicho. 


> Hazte Lapón + Gúdar: Puente aéreo [La Fonoteca, 2014]. Muerte en Bangock /Carretera perdida. En la cara A, un tema de cada grupo versioneado por el otro. En la cara AA, los originales. 
«Muerte en Bangcock» es uno de los mejores temas que se han hecho en el underground patrio en los últimos cinco años. Gúdar introducen un teclado trotón y un juego de voces que le dan un efecto muy peculiar. La original de Gúdar es una de esas miniaturas suyas extrañas y desasosegantes, en la que el oyente no sabe si es terrible o cómico lo que cuentan. Por su parte, Hazte Lapón se han animado a incorporar unos vientos para vestirla. 
El diseño de la cubierta es de Santiago Morilla. La masterización la ha llevado a cabo Raúl Querido

jueves, 22 de mayo de 2014

Strano mondo di tanti nomi #31: Thee Oh Sees

Cuenta quien ha visto tocar en directo a Thee Oh Sees que este quinteto de San Francisco se muestra supervitaminado y mineralizado cuando se sube al escenario. Vamos, que le dan caña al asunto. En el estudio de grabación también intentan plasmar toda esa energía suya, hija del garaje, la psicodelia y el punk, según le dé a John Dwyer, su líder natural y personaje más cambiante que el viento. 

El reciente Drop (Castle Face, 2014) es su noveno asalto como Thee Oh Sees, si bien el mentado Dwyer tiene grabado alguno más como Thee OhSees (cuestión de espacio), The Oh Sees (cuestión de vocales) y otros ancestros del proyecto. 


Como buenos habitantes de la Bahía, la psicodelia es la principal invitada en los nueve cortes (ni media hora en total) del álbum. Esos trenzados de psicodelia van acompañados de guitarras pesadas y desmelenadas, llenas de fuzz y largos desarrollos que atrapan como una tela de araña espesa, y hasta con cierto aroma a glam a ratos. En fin, el rock setentero más denso y contundente con ganas de elevarse por los aires, talmente como una mariposa de plomo (Iron Butterfly, you know); sólo que ahora ya hay Red Bull para conseguirlo. Escuchar Drop es como meterse un auténtico sobao pasiego entre pecho y espalda, con su bien de mantequilla deshaciéndose en la boca, y que la cosa te parezca ligera. 


La formación actual: John Dwyer (voz, guit.), Brigid Dawson (voz, tecl.), Petey Dammit! (bajo), Mike Shoun (bat.) y Lars Finberg (guit.).

domingo, 18 de mayo de 2014

Grafitis por el mundo #37

Los muros de la antigua fábrica de Tabacalera de Madrid han vuelto a colorearse con los trabajos de conocidos artistas urbanos. En la muestra de este año llama la atención de contenido social y político de algunas obras.









No muy lejos de allí, en otra calle del barrio de Lavapiés, un grafiti de enfoque femenista:

viernes, 16 de mayo de 2014

Todo el mundo quiere a PJ Harvey #16

En 1998 Pascal Comelade parió su obra magna, L’Argot du Bruit (Les Disques Du Soleil). En su mayor parte, era un fascinante recorrido instrumental por sonidos tradicionales y folclóricos, una fiesta armónica a base de acordeones, guitarras flamencas (Toti Soler en persona), melódicas, triángulos, órganos, vientos… 

Sólo en cuatro de las catorce piezas había interpretación vocálica. Un par de ellas nacieron del extraño ayuntamiento profesional entre Comelade y una ya por entonces muy afamada PJ Harvey. En mutua colaboración, compusieron «Green Eyes» y «Love Too Soon». En ambas, además, él toca los teclados y ella canta. Escuchada de nuevo hoy la segunda de ellas, sigue sonando tan hermosa, profunda y emocionante. Es, probablemente, una de las mejores interpretaciones vocálicas que jamás haya grabado PJ Harvey:

martes, 13 de mayo de 2014

Preparados para un solo de órgano #26


Laurens Hammond patentó el órgano que lleva su apellido el 19 de febrero de 1934. Acaban de cumplirse, pues, 80 años de su invención, y otro tanto sucederá en 2015 con la fabricación del primero de ellos. Aunque la empresa ya no existe como tal —es Suzuki quien los fabrica desde 1978—, este teclado de sonido único y característico sigue vigente hoy día. Para celebrarlo, pongamos un par de ejemplos de plena actualidad: Trio Valore y Elkano Browning Cream. 

> Trio Valore 
Podría considerarse una superbanda, pues este trío nace de la unión de afamados talentos musicales: Steve White a la batería (The Style Council, Oasis, Dr John, The Who) y Damon Minchella al bajo (fundador de Ocean Colour Scene), que se conocieron al coincidir como músicos de acompañamiento en los conciertos de Paul Weller. Toma pedigrí. En realidad, Trio Valore se trata de la continuación de un proyecto casi idéntico, The Players. La única diferencia notable es que allí el teclista era Mick Talbot (también ex Style Council) y ahora el órgano lo toca Justin Shearn, que sustituye a Seamus Beaghan desde 2013. En resumen, como anuncia su discográfica: ¡Mod-Jazz-Funk Supergroup! 
Aunque la mayor parte son composiciones propias, sobresalen la interpretación que hacen de algunas versiones. Oigamos dos de ellas: la primera con Beagham al Hammond y que proviene del álbum The Return of Iron Monkey (2008); la segunda con Shearn, publicada en 7’’ este año por Record Kicks. En la versión que hacen del rollingstoniano «Paint It Black» —aquí titulado curiosamente en español como «Pinturas negras»— es brutal la fuerza del Hammond, cómo se acopla al ritmo martilleante de la batería y baila a su alrededor. «Crazy» está más arreglada, más cocinada, vientos incluidos, pero tiene un groove sostenido envidiable. 




> Elkano Browning Cream 
Uh Eh (Mamusik, 2014) es el cuarto álbum de esta otra formación de concepto muy similar a la anterior. De nuevo un trío, aunque en esta ocasión sus orígenes son muy dispares: un español (Mikel Azpiroz, al Hammond C3), un francés (Franck Mantegari, batería) y un británico asentado en Barcelona (Dave Wilkinson, guitarra). La mayor parte son también temas instrumentales, aunque incorporan voz en algunos, como en este guatequero «Tout est bon», cantado por el propio batería: 

domingo, 11 de mayo de 2014

Ette aquí #56: The Pirouettes


Mira que les gusta a los franceses los dúos —y no digamos los tríos, que hasta le tienen puesto un nombre especial la mar de sonoro—. La historia del pop galo está preñada de colaboraciones a dos voces tan significativas y señaladas que repetirlas aquí sería minusvalorar a los lectores. Los grupos de chico y chica también los bordan. Últimamente, por ejemplo, hemos traído aquí a The Limiñanas

En una onda más naíf, juguetona y deliciosamente irresistible son The Pirouettes. Es lo suyo un electropop en el que se entrelazan, con una eficacia melódica formidable, las voces de Vickie Chérie (voz y teclados) y Leo Bear Creek (voz, teclados y percusión; es también batería de Coming Soon). Después de dos EP, publican ahora L'importance des autres (2014). Contiene siete canciones como siete soles; precisamente ahora que parece que el calor ya es definitivo, se adivina que este ramillete de melodías van a sonar mucho este verano al borde de las piscinas. Es tan corto y tan refrescante que es imposible no darle de nuevo al play según acaba. Y «Oublie moi» en concreto, y muy al contrario de lo que predica el título, es inolvidable.



Hubo otras The Pirouettes de las que apenas se encuentra información. Parece el típico girl group de los años sesenta. Publicaron el 7'' If You See My Baby/The Wrangler Stretch (Diamond, 1964). Ambos temas aparecen compuestos por Norman Meade y Ben Raleigh, y producidos por Jerry Ragovoy, ni más ni menos. Por cierto, Norman Meade era el seudónimo que usaba a veces Ragovoy en sus composiciones.

jueves, 8 de mayo de 2014

Gramatiquerías #11: Part Time

Qué bueno cuando un disco comienza así de directo, sin dar tiempo al oyente ni a situarse, casi diríase in medias res si estuviéramos hablando de literatura: 



Es el arranque de PDA (Mexican Summer, 2013), segundo álbum de Part Time o, lo que viene a ser lo mismo, el synth-pop romanticorro, elegante y ochentero del californiano David Speck. Igualmente disfrutable es la tríada situada justo en medio del álbum (cortes 5, 6 y 7). Aunque en general no hay demasiadas variaciones respecto al álbum de debut, puede entreverse aquí el inicio de la búsqueda de nuevas rutas musicales. Su anterior disco no es que fuera el reino de la oscuridad más absoluta, pero sí tenía ingredientes algo más oscuros que PDA. También se le nota un acercamiento a un tipo de soft-pop algo más meloso, sintético y como de etiqueta. Y por último, una querencia por la cultura mexicana muy curiosa, y no sólo porque publique en un sello llamado Mexican Summer. 


En la portada, aparece a lomos suyos el protagonista de la serie televisiva El Chapulín Colorado. Y el penúltimo tema, que está cantado/chapurreado en español de México a ritmo sabrosón y cuyo título y estribillo —«Soñando de ti»— es una bárbara y disparatada traducción a pelo del inglés, comienza con un «Oye, oye chaparrita», que resulta que, cuando termina el disco, continúa revoloteando por tu cabeza y te das cuenta de que no hay forma de desprenderse de esta chorrada de canción ni aunque seas consciente de que incluso tiene un solo de saxofón. 



Oye, oye chaparrita…

sábado, 3 de mayo de 2014

Strano mondo di tanti nomi #30 // Género chico #59: Loor A Los Héroes

Loor A Los Héroes (LALH) pertenece a esa estirpe de bandas extranjeras fascinadas con la sonoridad del español a la hora de escoger un nombre artístico: Yo La Tengo, Papas Fritas, The Delgados… (pínchese aquí para ver algunas más). En este caso, el nombre está tomado de uno de los famosos carteles que hizo el ilustrador valenciano Arturo Ballester para la CNT.


Pero, sobre todo, LALH pertenece a esa estirpe de bandas británicas que parecen llevar en su ADN los genes del mejor pop, o de haberlo mamado. Con una facilidad envidiable, con una pericia técnica que a muchos les lleva años conseguirla, con una soltura exultante y una manera de interpretar arrebatadora, estos mozalbetes se marcan sin despeinarse piezas así de briosas: 



Son de Ashton, al noroeste de Inglaterra, pero ha sido un nuevo sello independiente español el que les ha publicado su primer 7’’ —pequeña tirada en vinilo de color rosa— con otras dos maravillosas canciones: Heartbreak Girl/White Village (Pretty Olivia, 2014). Más concretamente, la impresionante cara B está llamada a ser uno de los temas del año: 



Es curioso que estos tres minutos y medio tan emocionantes y jubilosos hayan quedado relegados a la parte de atrás, pero una de las ventajas de los singles es que puedes decidir tú cuál es la cara principal y pincharla a tu antojo. Además, la historia de la música pop está llena de historias como esta. 

Acaban de rodar un vídeo para un nuevo tema, que según anuncian ellos mismos saldrá a final de este año. A esta banda no hay que perderle la pista. 


Son: 
Flynn Murnan – Voz, guit. rítmica y compositor 
Matthew Smith – Guit. y coros 
Chris Mcintyre – batería 
Joseph Howard – bajo

Y aquí pueden descargarse algunos temas suyos.

viernes, 2 de mayo de 2014

Sales en mi canción #78

En el after-punk australiano de los años ochenta brillaron los oscuros y un punto góticos The Church, aún en activo como las leyendas vivas que son en su país (al parecer, están preparando nuevo material pero sin el guitarrista Marty Wilson-Piper). Su debut data de 1981; su último álbum publicado hasta ahora se titula como el número que este hacía en su discografía: Untitled #23 (2009). En medio de ambos, allá por 1996, Magician Among The Spirits, que se abría dando la bienvenida de una manera muy peculiar. «Welcome» —de acuerdo, el título no es muy original— es uno de esos trenzados atmosféricos tan de The Church, sostenido por una estructura sinuosa que avanza, retrocede y vuelve a avanzar. La guitarra del estribillo es memorable. 

La letra es una retahíla de ocho estrofas copadas de nombres de artistas variopintos y personajes de todo tipo —de Camus a Magilla Gorilla, pasando por la dominatrix Madame Lash o el científico Alexander Bell— a quienes en la última estrofa The Church señalan como las estrellas que iluminan sus vidas. La letra también participa de esa estructura particular. Se divide en dos partes, separadas por un enrevesado interludio instrumental. En la primera, el estribillo aparece después de cada dos estrofas; en la segunda, el estribillo se incorpora después de cada línea. Y de coda, esa estrofa final aludida. Pinchando en este enlace puede leerse la fenomenal ristra de nombres al completo. Nosotros aquí destacaremos aquellos pertenecientes al mundo de la música: 

Leon Redbone, Cilla White, Johnny Thunders, Brian Wilson, Harry Belafonte, Richard Hell, Johnny Halliday, Johnny Cash, Tiny Tim (fallecido precisamente en 1996), Milli Vanilli y Andy Kim.

jueves, 1 de mayo de 2014