martes, 28 de febrero de 2012

Género chico #20

Tarde en la tal vez más polvorienta y destartalada tienda de segunda o quinta mano que exista en la ciudad. Botín, cuatro sencillos: 

> TINA CHARLES: I Love To Love (But My Baby Loves To Dance/Disco Fever (CBS, 1976). 
A Gog le gustaba mucho este temazo disco de finales de los 70 con su bien de violines, pero lo que realmente le hizo llevárselo el otro día es que en la galleta de la cara A la antigua propietaria tenía escrito a bolígrafo: «Amar y no ser amada o esperar y que nunca llegue». 
El título de la cara B lo dice todo. 

> RINGO STARR: Back off Boogaloo/Blindman (Odeon, 1972). 
¡Guau, menuda sorpresa! Porque Gog desconocía esta pieza recargada pero poderosísima del escarabajo aporreador. Empieza la batería, claro, y su presencia se mantiene abrumadora durante los tres minutos mientras alterna con coros estupendos, teclado chispeante y George Harrison a la guitarra, quien además la produjo. Al parecer el propio Ringo explicó que se le ocurrió el título cenando con Marc Bolan, que repitió varias veces la palabra boogaloo durante la velada. Este tema no se incluyó en ningún álbum, hasta la reedición de Goodnight Vienna. La cara B del single es una rayada experimental que no carece de interés. 
El vídeo, otro descubrimiento, es entrañable hasta la delicia. 



> THE MONKEES: I’m a Believer/Steppin’ Stone (RCA Victor, 1967).
Qué gusto volver a experimentar aquella fascinante sensación cuando dabas la vuelta a un single recién comprado y resultaba que la cara B era mucho mejor aun que la titular. En este caso en concreto, la fuerza de «Steppin’ Stone», un desparrame de palmas, órgano y coros, se come a la versión del afamado tema de Neil Diamond.
Les tenía ganas Gog a The Monkees últimamente. The Monkees era ese grupo que se formó de manera artificial para rivalizar con los Beatles en EEUU a través de una comedia televisiva creada expresamente con fines comerciales. Al principio ni siquiera tocaban ellos los instrumentos. Luego, en un ataque de dignidad, decidieron hacerse músicos, aunque las dudas y el sambenito siempre les persiguieron. El caso es que hace poco Gog comenzó a interesarse más por ellos después de leer la siguiente anécdota: cuando le tocó el turno a Micky Dolenz para pasar el casting que se anunciaba en el periódico, entró en una sala donde había una mesa con varias botellas de Coca-Cola vacías; por detrás, completamente a oscuras, acechaban Bob Rafelson y Bert Schneider, los productores de la serie; Dolenz se acercó a la mesa con su sempiterna sonrisa, movió una de las botellas y dijo «Jaque mate». Le contrataron inmediatamente para interpretar a uno de los miembros de la banda. 

> ART GARFUNKEL: In a Little While (I’ll Be on my Way)/And I know (CBS, 1979).
Dos canciones melódicas sin ninguna trascendencia.

domingo, 26 de febrero de 2012

Gog, reportero #1: Los Lagos de Hinault

Los Lagos de Hinault y sus Vidas ejemplares (Fikasound) fue un gozoso soplo de frescura en el indie español de 2011. Gog se quedó enganchado a él, así que ha decidido meterse a reporter poniéndose al habla (escrita) con ellos. Carlos Ynduráin se presta muy amablemente a responder estas pobres divagaciones de Gog. 

G.- ¿Montáis en bicicleta o se trata más bien de una pose de sofá? Lo pregunto porque lo de llamarse Los Lagos de Hinault más parece un referente nostálgico para vosotros. ¿Cómo surgió? 
CY.- Es más bien de las retransmisiones de la Vuelta de principios de los ochenta... Pero eso sí, desde hace unos meses he empezado a montar en bici. 

G.- Vuestra revisión de «Amor en frío», que escribió Santiago Auserón, ¿proviene de la versión de Las Chinas o de los propio Radio Futura? 
CY.- Conozco las dos desde hace mucho tiempo... No sé cuál escuche antes, la verdad. Cuando hicimos la versión teníamos ambas en la cabeza. 

G.- Aún no he tenido ocasión de veros en directo, pero según tengo entendido de momento os limitáis a Matilde y a ti más las bases pregrabadas. ¿Tenéis pensado llamar a alguien más para acompañaros en los conciertos o vais a seguir así? 
CY.- Matilde ahora no está en España, pero yo ya he empezado a ensayar con un batería y pronto se incorporará un teclista. Cuando vuelva Matilde espero que esté ya todo bastante avanzado y podamos ponernos a tocar rápidamente. Igual da tiempo a dar algún concierto con banda antes del verano. 

G.- Tanto en lo musical como por el contenido de las letras, entre melancólico y cínico, recodáis mucho a The Magnetic Fields. Supongo que es una tontería preguntarte si te gusta Stephen Merritt, quien, por cierto, viene a tocar por aquí dentro de poco. 
CY.- Me gusta mucho, pero todavía no tengo entrada... 

G.- ¿Hay algún grupo de la escena indie española que sigáis especialmente? 
CY.- Espanto nos gustan mucho tanto a Matilde como a mí. 

G.- ¿Por qué lado de los prismáticos miráis el panorama actual: es para echarse a temblar o tampoco parece para tanto? 
CY.- No sé, ahora hay muchas cosas que me gustan y que parece que gustan a más gente. Eso sí, también hay muchas cosas que no soporto y que gustan a mucha más gente todavía. Hay más de todo; tanto para bien como para mal. 

G.- He señalado con el dedo tres veces sobre diferentes partes de vuestras letras, he unido esos versos y ha salido lo siguiente en los dos experimentos que he realizado: 
Primer intento: "Lo ha dicho Radio Nacional, es más cuestión de orgullo, nunca llegaré a ministro". 
Segundo intento: "Llevan cámara de fotos y aprovechan para soltarse la melena, es efecto del prozac". 
¿Podrían tener algún sentido para ti? 
CY.- La verdad es que se me hace muy raro ver las frases descolocadas... Me pone un poco nervioso, de hecho. No, no tienen ningún sentido para mí. 

sábado, 25 de febrero de 2012

Cameos musicales #33: Doce del patíbulo

Doce del patíbulo (1967) es la peli definitiva para tíos, para hombres duros y de pelo en pecho, que detestan las caricias y las puestas de sol, se afeitan con agua fría, se enjuagan el gaznate con alcohol de 96º y no se les salta una lágrima aunque les estén apretando los huevos con unas tenazas, porque en Doce del patíbulo los hombres son así y ninguno se permite flojear, aunque el cantante Trini López hiciera un amago en una escena. Hasta que Lee Marvin, ese superhombre, le callase con la mirada:


A favor de Trini López hay que decir que se le considera uno de los pioneros del rock n’ roll y que nadie ha alcanzado su nivel interpretativo en la cien mil veces versioneada «La bamba». El tema que cantaba en la película era «The Bramble Bush», original de Frank De Vol y Mack David.

viernes, 24 de febrero de 2012

Hoy llego tarde #4: Outkast


En 1998 Gog aún no escuchaba hip-hop. Eso es así y punto. De hecho, no es un palo que practique ni mucho ni habitualmente (exceptuando a sus asiduos Kanye West o la Mala Rodríguez, poco más; del rap guerrillero en plan Public Enemy, Beastie Boys o cosas así, nada que decir). A Outkast, en concreto, no los descubrió hasta el Speakerboxxx/The Love Below de cinco años más tarde, y aunque "Hey Ya!" le entusiasmó, no fue suficiente para que se animara a revisar la discografía anterior del grupo. Ha sido recientemente, tras un comentario muy elogioso por parte de uno de los componentes de TV Girl, cuando Gog se ha puesto oídos a la obra. Ha empezado por Aquemini (La Face/Arista, 1998), que contiene, entre otros exultantes arrebatos, "SpottieOttieDopaliscious". 

Es el duodécimo tema del álbum. Comienza con un ritmo que proviene directamente del soul calentorro de los 70. Y de repente aparecen unas trompetas que, por portentosas y absolutamente inesperadas, te enganchan y te mantienen en vilo durante esos siete minutos memorables. Increíble qué pieza. Se alternan a las voces Hook, Pat Brown, Dre y Big Boi, cuyo último spoken es de los mejores entonados que ha escuchado Gog. 

OUTKAST - SpottieOttieDopaliscious

Como dice la letra, It's just my interpretation of the situation. Sea como fuere, imposible quitársela de la cabeza desde entonces.

miércoles, 22 de febrero de 2012

La influencia del centeno en la cultura popular #19 // Debut #49: Azure Blue

Foto de una playaza. ¿Disco desde California sun? No. Desde Suecia. Es decir, sol porque allí debe de echarse de menos el sol. Y es que en The Catcher In The Rye —la referencia no puede ser más explícita— late permanentemente la impresión de que se anhela lo que no se tiene, de un aire ensoñador y de un querer aferrarse a una época pasada que nunca le hubiera gustado abandonar a Tobias Isaksson, que es quien se ocupa de Azure Blue y de este su debut (Matinèe, 2011). El single que lo presenta se titula igual que el álbum, pero Gog prefiere saborear la exultante pieza de pop electrónico, como sólo los suecos saben hacerlo, de «Dreamy Eyes».

  Dreamy Eyes - Azure Blue

lunes, 20 de febrero de 2012

Cosas de hermanos #22 // Ellas llevan el ritmo #20: The Shaggs

¿Young Marble Giants los reyes del menos es más? ¿The Modly Peaches y toda la escena anti-folk amos del pop destartalado? ¿En K Records los únicos valedores del do it yourself, el lo-fi de poca monta y el toca-lo-mejor-que-sepas-pero-no-aprendas-a-tocar? ¿Que le den por saco al bajo? Pues atención a esta pasada de 1969:


Y así durante los 33 minutos que duran en total las 12 canciones aparentemente descacharradas del único álbum oficial que publicaron The Shaggs en 1969. Dorothy (voz, guit.), Betty (voz guit.) y Helen (bat.), las hermanas Wiggin. Luego nunca más. 


Eso sí, reconocimiento posterior, reedición en 1980 y álbum de tributo en 2001: Better than The Beatles. A Tribute to The Shaggs (Animal World).

domingo, 19 de febrero de 2012

Plataneces #28 // Y esllos se juntan #51

Carne para abogados, que al parecer ya están en ello, porque dicen que uno de los últimos temas de Madonna se parece sospechochasamente demasiado a este de João Brasil:


El uno ha llamado a Lovefoxxx y la otra a M.I.A. y Nicki Minaj para que colaboren con ellos. En cualquier caso, por todas partes mucha banana, mucho a nivel love y muchos puntos en las p.a.l.a.b.r.a.s.

sábado, 18 de febrero de 2012

Últimamente se está muriendo gente que no se había muerto nunca #22: Enrique Sierra

Se ha muerto Enrique Sierra: Kaka de Luxe, Radio Futura… ya sabéis. A los 55. Bonito número para morir. Como decía la letra de «Escuela de calor», de la que fue coautor, fue una paloma que siempre sobrevoló el peligro.


Imposible explicar a Gog sin Radio Futura. Al mismísimo Sierra se lo cruzó por la calle muchas veces en el barrio paterno hace ya… Se ha muerto Enrique Sierra.

jueves, 16 de febrero de 2012

Como decíamos ayer... #12: Wild Swans

The Coldest Winter For A Hundred Years (Occultation, 2011), de The Wild Swans: uno de los discos más románticos que Gog ha escuchado en mucho tiempo, de un romanticismo entendido en su sentido épico y ético, no como una fórmula marchita sanvalentinesca. 

Es un álbum para llorar pero para salir fortalecido. Del que cae y se arrastra por el barro pero es capaz de poner las dos manos en el suelo e impulsarse hacia arriba de nuevo. Y así son sus canciones, almas que caen y se levantan continuamente. Y a Gog le vienen a la cabeza aquellos versos de The Go Betweens según los cuales que caiga la manzana al suelo no es una cuestión de gravedad sino de independencia. 

Para quien precise ubicarse un poco, Paul Simpson, centro neurálgico del tinglado, fue cofundador de The Teardrop Explodes, es decir, escena Liverpool junto a Cope, McCulloch, etc. —toma pedigrí— antes de fundar a los rectos y, por lo tanto, perdedores Wild Swans, que en la década de los 80 publicaron tres discos al margen de la gran industria; hasta prácticamente hoy.

Si «Liquid Mercury» y «Chloroform» son preciosas, «English Electric Lighhtning» es maravillosa, con esa facilidad tan inglesa para hablar de sí mismos:

Elizabethan costume dramas 
Sun reporters, New World Order 
Johnny Rotten, Geoffrey Chaucer 
Bargain Booze and Robert Wyatt 
Happy-slappers, Toxteth riot

The Wild Swans - English Electric Lightning

martes, 14 de febrero de 2012

Una pequeña historia del rock a través de una sola portada #4

Hacía mucho tiempo que Gog no hallaba una portada para esta sección (pínchese en la etiqueta para ver toda la sorprendente serie del tirón), así que hoy está muy contento. Como suele ocurrir casi siempre, ha sido el azar el que le ha llevado hasta esta carátula de Hasil Adkins, de un directo suyo de 1992. Y es que andaba Gog interesándose por las canciones que ha reunido el sello Munster para el recopilatorio de singles de The Cramps —a la espera de que le llegue la caja por correo—cuando se ha topado con que una de ellas, «She Said», era de un tal Hasil Adkins. ¿Quién? Pues eso, a investigar un poco. 

Pronounced ‘Hassle’ not ‘Haysil’, afirma la wiki en la bio (1937-2005) de este personaje extravagante y con una punta de alunado, precursor de los mismísimos Cramps. Se le considera el padre del psicobilly, o sea, rock n’ roll o más bien rockabilly pasado por unas letras acerca de historias truculentas, ciencia ficción y sexo escabroso. Adkins decía tener un repertorio de más de siete mil temas compuestos por él; de lo que se conoce, la mayoría versa sobre cabezas decapitadas, truculentos episodios de cama, alienígenas y toneladas de carne, desde los hot dogs al pollo (en Poultry in Motion se recopilaron todos sus temas dedicados a esa especie aviar). Los grababa en la autocaravana en la que vivía con un magnetófono de manera absolutamente artesanal. Había ideado un sistema de pedales para tocar él solo la batería mientras tocaba la guitarra, la armónica y cantaba. 



[Entrada dedicada a Jaime Cristóbal, buceador de cubetas, rastreador de tesoros vinilescos ocultos y sapiente musicólogo, que le puso a Gog en la pista de la caja de los Cramps.]

domingo, 12 de febrero de 2012

Doble o nada #8: Jonathan Wilson

Cae la aguja sobre los primeros surcos. Suena, por un solo altavoz, un piano de música clásica, en plan Debussy o algo así. A los treinta segundos se detiene y salta, ya por ambos altavoces, un punteo de guitarra; se suma un piano de nuevo y Jonathan Wilson comienza a cantar. Hummm… la melodía recuerda a The Korgis o al primer Leo Sayer. Suena cálido, bello, reconfortante. Todo en Gentle Spirit (Bella Union, 2011) suena cálido, bello, reconfortante. Es un aroma a añejo y a verdes y fragrantes praderas que permanece a lo largo de los trece cortes del álbum. 

El segundo tema está bañado con un chelo, hasta que estalla un piano que acaba por reconvertirse en órgano. ¡Leches, cómo duele! Seis minutos de emoción incontenida. La tercera se inicia con unos sonidillos de tecnología analógica, pero en cuanto entre la guitarra volvemos al sabor a barrica de roble o gran reserva cosecha del 70; esta se va hasta casi los ocho minutos. Y así prosigue el disco, como un riachuelo inagotable. La séptima, por ejemplo, órgano mandón y silbido de fondo. ¡Guau! La octava es una nana para adultos que te mece y te acaricia, y de nuevo flota el órgano mientras Wilson canturrea laralalaes. 

Si uno se sumerge en esta epopeya sale exhausto del dolor que causa tanta belleza. Wilson canta demoradamente, sin prisa, y cada palabra que pronuncia, cada tecla que pulsa, cada cuerda que rasga, con pausa y calma cruel, son como un bisturí que se desliza por la piel.

¿Que quién es este Jonathan Wilson? Pues un amante del flower power que vivió un tiempo en una comuna jipi de California, aprendió los rudimentos de la ingeniería de sonido y montó una impresionante colección de equipos de grabación analógica. Por su estudio de Laurel Canyon han pasado Costellos, Badus, Brownes, Oldhams… 

Para los amantes del objeto, el vinilo es doble, con tapas de cartón reciclado. Y «The Way I Feel» es version de Gordon Lightfood.

 
Hace mucho frío. Para qué vas a salir a la calle; quédate en casa con una buena chaqueta de lana y este disco de fondo.

sábado, 11 de febrero de 2012

5 sobre... #16: ser o no ser un gran artista

Uno de los componentes del dúo TV Girl —en los que Gog tiene depositadas muchas esperanzas— ha publicado en su muro que una vez leyó que para considerar verdaderamente grande a un artista tiene que haber publicado cinco grandes discos de forma consecutiva. Él propone: Dylan, Springsteen, Velvet Underground (incluyendo el álbum perdido), Beastie Boys y Outkast. La iniciativa ha sido muy bien recibida y muchos seguidores han recogido el guante y han propuesto los suyos, Gog incluido, que ordenados cronológicamente serían: 


> The Clash: de acuerdo, Combact Rock es muy muy discutible, pero todo lo anterior es tan enorme... 

> Elvis Costello: parece bastante impepinable que sus cinco primeros discos son magníficos. 

> Smog: bien con ese nombre artístico, bien como Bill Callahan, tiene encadenadas rachas fantásticas; como Smog, desde Red Apple Falls

> Pavement: al igual que con The Clash, puede que el último que publicaron sea más que discutible. 

> Clinic: son una debilidad de Gog; es más que posible que no tengan ni siquiera un gran álbum, pero todos los que tienen son muy buenos.


Como se ve, no es más que una cuestión de filias muy personales. 

martes, 7 de febrero de 2012

Debut #48: Unknow Mortal Orchestra


De nuevo ha sido la portada. Andaba Gog revolviendo las cubetas de su tienda habitual cuando se topó con la fotografía de un extraño edificio [*]. ¿Qué era aquello? ¿De quién era aquello? Ni idea. Pero atraía.

De haber sido otra época, probablemente Gog se lo hubiera llevado a ciegas, guiado tan solo de su instinto lazarillo y del impulso que le conferían las buenas vibraciones de la cubierta. Hoy día puedes dejar allí el disco (sin necesidad siquiera de cambiarlo a una cubeta más apartada si no llevabas dinero suficiente en ese momento), ir a tu casa, encender el ordenador, descargártelo y, después de escucharlo detenidamente, decidir si te lo compras o no. Así fue. Y en cuanto le sonó «Ffunny Ffrends», Gog supo que tendría que llamar a la tienda para que le apartaran el vinilo.

Unknown Mortal Orchestra-FFunny Frends

Dos o tres escuchas después de este hipnótico, extraño y desconcertante disco, llegó el momento de recabar información internetaria. Gran sorpresa, resultó que se había hablado mucho de ellos en blogs de la cosa alternativa el año pasado y que incluso pasaron en otoño por estas tierras, todo lo cual le había pasado desapercibido a Gog.

El homónimo Unknown Mortal Orchestra (Fat Possum, 2011) proviene de Nueva Zelanda, y resulta que la foto de la portada, con ese aire de futuro antiguo, casa a la perfección con lo que se desarrolla dentro: canciones que contienen muchas reminiscencias del pasado y al mismo tiempo suenan con un tinte futurista, pero pasado por el tamiz analógico. La mayor parte de la gracia está en la combinación de bases funk muy rítmicas, guitarras cortantes y una batería seca que consiguen una mezcla retorcida, oscura y extrañamente pegadiza. A Gog le resulta imposible no darle de nuevo al play al terminar.

 

Cortes:
1. FFunny FFrends 
2. Bicycle 
3. Thought Ballune 
4. Jello and Juggernauts 
5. How Can You Luv Me 
6. Nerve Damage! 
7. Little Blu House 
8. Strangers Are Strange 
9. Boy Witch


[*] Se trata de un monumento (spomenik) que mandó erigir Tito en Yugoslavia, según le ha puesto en la pista un arquitecto amigo de Gog, por otra parte un habitual de este rincón. La instantánea, como todas las de la serie que puede verse aquí, son del fotógrafo belga Jan Kempenaers.

domingo, 5 de febrero de 2012

Discos con portada con discos #39

 Black Box Revelation: Lust Or Love (Exclusive red heart shaped 12'')

Karen Elson: Vicious / In Trouble With the Lord (7'')

Toddla-T (con Roisin Murphy): Cherry Picking (12”, 300 copies, red vinyl, 2011)

viernes, 3 de febrero de 2012

Género chico #19: Miles Kane


«Come Closer». Ritmo trotón, guitarrazos duros y alma glam. La mejor canción hasta la fecha de Miles Kane, artista a la sombra de Alex Turner y The Last Shadow Puppet que comienza a brillar por sí solo poco a poco. 

Es el tema que encabeza Come Closer EP (Columbia, 2011), que un buen y generoso amigo acaba de regalar a Gog en precioso vinilo de 7’’. 

Le sigue «Do I Want You?» entre el brit pop y la cosa mod. Kane se ha declarado públicamente fan de Oasis y de Paul Weller, así que ni oculta nada ni puede sorprender en él el ejercico musical retro que practica.

En la cara B, «Kaka Boom» contiene guitarras más agudas y teclados calentorros a las riendas; hay momentos en que parece que vaya a arrancar «You Really Got Me». Cierra «The Responsible», que es versión del tema del francés Jacques Dutronc; aquí Kane ha optado por mantener el toque sixtie y yeyé.

Miles Kane - The Responsible